Algunos ejercicios para las varices

Publicado por: @lnkvrd el 10 julio, 2014
Varices

Las varices son aquellas venitas que vemos en las piernas, generalmente detrás de las rodillas y que se pueden expandir hacia abajo y a los lados. Resultan además de antiestéticas, muy dolorosas, y esta sensación se puede empeorar en diferentes circunstancias, como el permanecer sentado muchas horas, estar de pie por mucho tiempo y uno de los factores más importantes, es la herencia de esta condición. Las piernas se hinchan y el cansancio es inconfundible, y muchas veces se dificulta el caminar por esta razón. Si eres de aquellos que padece de las incómodas varices tenemos una serie de ejercicios para aliviarlas.

Los tipos de trabajos en la actualidad en los que permanecemos quietos, empeoran la sensación de dolor y cansancio, así que lo primero que debes tener en cuenta es la movilidad. Necesitas activar tus piernas y mantenerlas en movimiento, aunque no sea constantemente, si dedicarle un momento a diario para fomentar la buena circulación de la sangre en esta parte de tu cuerpo. Caminar es una excelente idea, aunque no participes en campeonatos, si puedes salir a caminar media hora o 20 minutos, sal al parque, inventa una excusa para comprar algo en la tienda o cuando llegues a algún lado en bus, bájate en una estación que quede antes para que tengas que caminar un poco más.

La bicicleta es fundamental, pero olvídate de sacar excusas si no tienes una. Puedes imitar el ejercicio en tu casa, en tu cama, en el piso y usando una esterilla o colchoneta delgada en la que te acuestas boca arriba, flexionas tus rodillas y comienzas a pedalear primero despacio, y luego vas aumentando la velocidad un poco. Toma una pausa de un minto y repite. Entre más arriba estén tus piernas más ayudarás a la circulación de tus piernas, y entre más abajo estén, ayudarás a trabajar tus abdominales. Ganas en ambas situaciones!

Conservando la misma posición, recostada en el piso y las piernas extendidas, solo sube una pierna bien estirada, formando un ángulo recto con tu cuerpo. Mantenla arriba y practica estirar y contraer tu pie, luego bájala, y repite lo mismo con la otra pierna.

Otro ejercicio es que en la misma posición, estirada totalmente en el suelo, flexiones solo una rodilla que llevas a tu pecho y ayudada con tus brazos como «abrazando» tu pierna, presionas un poco para mantenerla allí. Luego cambia con la otra pierna.

Cuida tu dieta, cuida tu peso, cuida tu postura al sentarte y caminar y practica estos sencillos ejercicios que nada te cuesta hacer en tu casa.