Diseña tu propio jardín japonés

Publicado por: @lnkvrd el 16 septiembre, 2016
jardin

Sabemos que puede no ser el caso de muchas personas, pero es posible que el tuyo si. Hay veces en las que re descubrimos que en nuestra casa hay un patio o jardín desaprovechado, o incluso si no es tu casa sino la de alguien que conoces y quieres darle una mano para renovar estos espacios olvidados pero con mucho potencial, esta es la oportunidad para que prestes atención.

Porque el contacto con la naturaleza es vital, te reanima, te energiza, te relaja y te hace valorar aún más estos momentos de contemplación de la vida y lo maravillosa que es en sus cosas más sencillas, es que deberías animarte a darle un nuevo giro a estos espacios. Decidimos esta vez darle un enfoque específico, y se trata de ponerle un toque japonés para sentirnos más inspirados en esta cultural espiritual y milenaria.

Para empezar es necesario tener muy claro que tipo de jardín es el que deseas lograr, para que sepas cual te conviene más y el resultado sea de tu agrado. Por ejemplo:

Si tienes un espacio amplio, las posibilidades aumentan ya que puedes tener un jardín de paseo, el cual te deja instalar caminos o senderos de recorrido por los que puedes caminar, rodear plantas y estaciones que ubiques. Un espacio grande también te permite optar por esos jardines de té, en los que se adiciona una pequeña choza o cabaña modesta para disfrutar la hora del té.

Con una zona un poco más reducida también se logran cosas maravillosas! Imagina construir un jardín de contemplación. Se trata de un lugar que tiene distintas secciones y funciona a su vez como un jardín zen, cuyo objetivo es facilitar la concentración y la meditación.

Los elementos que normalmente se utilizan en un jardín japonés son rocas, plantas y agua, pues la idea es hacer una semejanza al cosmos y a la naturaleza. Por eso construcciones demasiado elaboradas, modernas y con instalaciones que involucren mecanismos y tecnologías complejas no caben en nuestro caso. Piensa en la asimetría, lo sencillo y puro, por ejemplo las rocas que consigas y de la manera como las consigas, así mismo debes ponerlas en tu jardín, sin lavarlas, arreglarlas o pintarlas.

Para las plantas, depende mucho de tu gusto claro está, pero generalmente para este tipo de jardines se usan los árboles como el pino, el bambú y los conocidos komatsu, que son árboles de pequeño tamaño y permanecen jóvenes por mucho tiempo. Alguna planta que de flores pequeñas y de un bello color vibrante puede terminar de completar la sensación de armonía y felicidad que debe tener tu espacio. El musgo y los helechos también pueden hacer parte de tu jardín, así como el arena o la gravilla.

Inspírate en las creaciones japonesas pero al mismo tiempo déjate llevar por tu intuición, disfruta cada paso de instalación y siembra puesto es relajante y te sirve como terapia de meditación y contemplación. Cuando tengas listo tu jardín, frecuéntalo todos los días y pasa allí al menos 20 minutos para que hagas un intercambio de energía positiva con tu nuevo jardín y empieces cada día con la mejor disposición.