Las matemáticas y la culinaria
Al parecer no podremos librarnos de las complejas matemáticas bajo ninguna circunstancia. Y si, es cierto que para algunos resulta ser nada más que una piedra en el zapato basados en su experiencia durante el colegio, pero para otra gran cantidad de gente son una herramienta increíble. Después de todo para muchos es el lenguaje universal. Como sea, las matemáticas forman parte importante de nuestras vidas, y aunque muchas cosas que aprendimos en el colegio no las recordamos ahora o la verdad no tenían una trascendencia para nuestro futuro, los números y las matemáticas si, las usamos a diario y guardarán siempre alguna relación con nuestro entorno.
Hablando específicamente de la culinaria, sabemos que si nos gusta cocinar, muchas recetas las conocemos y calculamos más de una vez «a ojo» las cantidades, pero hacer uso de las matemáticas en estas circunstancias puede resultar bastante útil. Como por ejemplo:
Un chef que trabaja en un restaurante debe saber cuantas porciones de un corte específico de carne debe ordenar. Si los clientes han pedido X cantidad de esa carne, debe tener en mente que en el refrigerador queda todavía Y cantidad de cortes, Z cantidad en la parrilla, por lo que deben limitarse las ordenes de los clientes. Lo mismo ocurre con los proveedores, dependiendo del restaurante y el tipo de comida que se sirva, se necesitan más o menos frutas por ejemplo, y si vienen tantas manzanas o limones en una caja, y a la semana se gasta X cantidad, cuanto debe irse al mes? Pueden ser operaciones básicas pero de eso depende la rentabilidad del negocio, que no se desperdicien alimentos sino que rindan por el contrario.
Las medidas no son algo fácil de manejar, pues si acostumbramos a medir basados en cucharadas o cucharaditas, que ocurre cuando alguna receta te pide algún líquido en onzas? o si tienes un horno que mide en Fahrenheit y la receta te lo dice en grados Celsius? saber las conversiones en este caso es fundamental porque puedes cometer errores terribles que alteren totalmente el sabor de tu plato.
Y es que es para todo, descongelar un trozo de pollo por ejemplo cuando el empaque te dice cuanto tiempo llevarlo al microondas, pero el tuyo tiene más o menos watts por lo que debes calcular bien. Si vas a hacer una torta que es para 12 personas pero tiene 18 invitados como aumentas los ingredientes y en que proporción?
Ahora bien, si tienes un negocio, por ejemplo de postres, como sabes cuanto cobrar a tus clientes por cada porción de torta o por un cupcake? Analiza cada ingrediente y su costo, el arriendo y todos los gastos que implica tu local, el tiempo de preparación si lo haces tu mismo o si le pagas a alguien, todo eso debe tenerse en cuenta para que sea rentable y no pierdas dinero.
Los números son super importantes no solo en un negocio de cocina, sino en tus propias preparaciones caseras, pues aunque improvises e inventes, muchas veces debes tener cantidades exactas para garantizar el éxito de una receta. Es por ello que es necesario que revises que tan bien están tus operaciones matemáticas.
