Como cuidar de tu jardín en el verano
Como todos sabemos los meses de calor ponen a prueba el aguante de las plantas. Las temperaturas altas y el ambiente asfixiante de la ciudad causan muchas veces que las mismas mueran, aunque curiosamente, en la mayoría de los casos se deberá a un exceso de agua que es mucho mas dañino para las plantas que la sed, porque arruina la tierra, provoca enfermedades y acaba por marchitarlas.
- Agua sobrante
El agua que eliminan los tiestos arrastra buena parte de los nutrientes que la planta necesita para vivir, por ello no es conveniente malgastarla. Se pueden poner platos o bandejas debajo de los tiestos para recogerla y regar con ella el resto de las plantas.
- Limpieza de las plantas
Si bien es importante regarlas también lo es mantener a las plantas libres de hojas y flores secas, que seguirán absorbiendo agua y frenaran el desarrollo de las partes sanas. Asimismo, el polvo y la suciedad no las dejaran respirar. Es posible regarlas con agua jabonosa primero y luego regarlas con agua abundantemente. Además, este método alejara a los parásitos.
- Si tienes que salir de viaje
Es un error dejar las plantas en la bañera con agua cuando se sale de vacaciones: la tierra se encharca y las raíces se pudren. Un viejo truco consiste en colocarlas alrededor de un cubo con agua del que se sacan unos cordones gruesos que se enterraran en cada maceta. Los cordones conducirán el agua del cubo (por capilaridad) al tiesto en según su necesidad.
- Como y cuanto debes regarlas
Cuando regamos las plantas debemos tener en cuenta la cantidad de agua que la misma necesita. En la dosis exacta esta el éxito de su progreso. Las características de la tierra y de la planta determinaran el cuidado que se le debe dar. Cuando la tierra es arenosa apenas retiene el agua, por lo que se deben calcular las dosis antes de regarla. Las que son arcillosas, sin embargo, se encharcan mucho antes y pueden dar la sensación de saturación sin que el agua llegue a la zona de las raices. Aunque siempre es mejor regar al atardecer, (para evitar la evaporación inmediata), en otoño e invierno se puede hacer por la mañana, directamente bajo la planta, con un tubo o embudo. En los primeros días de sol primaveral es mejor añadir el agua al plato de las macetas, para que las raíces la absorban y no se dañen los brotes. Aun en los días de sol, la tierra de las plantas puede mantener buenos niveles de humedad en su interior, que se debe verificar introduciendo un palo y comprobando que sale empapado. Siguiendo estos pequeños consejos tendrás el mejor de los jardines para este verano.