Como sembrar plantas en tu propio jardín
No todos tienen el privilegio de contar con un jardín en su casa, o un espacio libre para decorarlo o adaptarlo a su gusto. Pero si eres el afortunado que sí cuenta con uno, vamos a darte algunos consejos para que puedas sembrar plantas y darle vida a ese espacio que va a complementar tu hogar.
Muchos piensan que no hay mucho misterio en la materia, que solamente hay que abrir algunos huecos en la tierra y luego introducir las semillas, tapar y poner agua porque del esto, la misma naturaleza se encarga. La verdad es que no es tan sencillo. Es necesario considerar varios factores para asegurar el éxito del Roberto y el resultado, como por ejemplo las condiciones climáticas, el momento del año en el que se hace, el tipo de semillas, la mezcla de unas plantas con otras, el tipo de riego, entre otras.
Piensa primero que todo, en la época que escoges pues la planta puede estropearse. En el lugar donde las compres te pueden orientar en ese aspecto, o bien generalmente traen una etiqueta que especifica el momento adecuado.
Cada planta es única y especial, por lo que plantarlas es un proceso diferente para cada una. Ten en cuenta el tamaño de la misma para de igual modo hacer el hueco, así como la distancia ente una y otra, y pensar en que las raíces crecerán, por lo que es necesario dejar buen espacio para eso.
Debes investigar con cuidado cuales plantas siembras juntas, pues algunas pueden perjudicarse entre sí, y otras crecen beneficiándose.
El suelo es fundamental, por lo que sí lo quieres reservar y preparar para plantar en el futuro hay ciertos cuidados que debes tener. Debes cubrir todo el terreno con un «acolchado» o capa protectora que generalmente tiene un grosor de 8 a 10cms. Se forma con materiales orgánicos como corteza o madera o venden unos preparados especiales en los viveros que te puede ayudar mucho.
Esta capa hace que el agua no se evapore fácilmente y conserve el suelo húmedo, también provee nutrientes a la tierra, protege las raíces de intensos climas, regula la temperatura y evita que crezca maleza u otras especies que pueden dañar tu jardín.
Todo esto parece muy complejo, pero es algo que haces solo una vez y puedes disfrutar mucho el proceso, sobre todo cuando ya ves que las plantas van creciendo y puedes apreciar un hermoso jardín hecho por ti.