Como energizar cada rincón de tu casa
Es cierto que no podemos estar en todos y cada uno de los espacios de nuestra casa, porque si llegamos cansados del trabajo lo primero que buscamos es nuestra cama. El baño es el lugar al que más acudimos y luego viene la cocina. Es decir, vamos con mayor frecuencia a los lugares que nos permiten suplir necesidades básicas, que nuestro cuerpo nos pide como lo son, dormir, entrar al baño y comer. Pero que hay de aquellas necesidades del espíritu, el corazón o la mente? esas son las que olvidamos o escogemos relegar un rato para darle prioridad al resto. Resulta que como todo en la vida, debe existir un equilibrio para que funcione, y en éste caso si que hay que ponerle más atención.
Cuando tengas un tiempo libre, o en fin de semana, echa un vistazo al estudio, o al cuarto donde tienes un taller o una salita pequeña y entra, analiza como te sientes, analiza que tipo de energía te llega, si es negativa o positiva y piensa como puedes cambiarla si es mala. Debes recuperar la armonía de esos lugares olvidados de tu propia casa. Adórnalo diferente, pon unas velitas aromatizadas, compra o consigue una silla bonita y si te gusta leer, deja tu cama para dormir y ve a ese nuevo lugar que te regala relajación y tranquilidad para realizar las actividades que te gustan. Mira el periódico en las mañanas alli, o toma el té de las noche o tardes en éste nuevo lugar. Verás que la energía cambia. Limpia esos espacios de basura que acumulas «sin querer», guardando cosas que por precaución o pesar no botas conviertes tus habitaciones en depósitos que le quitan vida y calor de hogar a tu casa. Propónte sacar lo que en verdad no usas tal vez no para botarlo pero para regalarlo a alguien más o analiza si puedes darle un nuevo uso funcional, visible e importante en tu casa.
El reto es hacer que cada rincón de tu casa sea acogedor, no dejes morir los lugares sino todo lo contrario, conquístalos! si eres de aquellos quienes gustan de las manualidades aún mejor, con simples materiales puedes darle vida decorando sencillamente las paredes o volviéndolo un lugar de reunión para que más personas impregnen de buena energía esas habitaciones. Si no eres muy hábil con las manos, puedes conseguir jarrones sencillos y con una flor grande dentro decoras todo un ambiente. Armate de esencias, inciensos o velas y el espacio cambia.
Atrévete a renovar tu propia energía cambiando la energía de tu casa para volverla más acogedora, alegre, dinámica y que invite a habitar y disfrutar.
