Qué saber sobre las microcalcificaciones mamarias

Publicado por: @lnkvrd el 28 febrero, 2014
SenosCuidado

Las mujeres sufren muchas preocupaciones por causa de la belleza, porque al parecer nunca es suficiente. Sin importar si se someten a múltiples cirugías o sólo se hacen uno que otro arreglito, sin importar si les gusta la moda y hacer shopping constantemente o prefieren un look más natural y descomplicado. A todas por igual les afecta tener alguna complicación con su salud, y una parte de su cuerpo que hay que tratar con delicadeza son los senos. El miedo por padecer cáncer de seno es constante pues cada día se ve como más y más mujeres mueren a causa de ésta terrible enfermedad.

Existen algunas formaciones llamadas microcalcificaciones, que se encuentran comúnmente cuando se realiza una mamografía o ecografía mamaria. Son pequeños puntos o bolitas de calcio que se forman en el tejido mamario, que muchas veces duelen bastante aunque de hecho muchas mujeres ignoran que las tienen. De acuerdo a su tamaño, aspecto y ubicación pueden clasificarse como benignas o malignas, pero también es necesario hacerse el auto examen juiciosamente para saber desde cuando hacen aparición ésta formaciones y poder llevar un registro de fechas y cambios, que le sirvan al médico que te revisa.

Generalmente estas bolitas son parte del proceso evolutivo del tejido mamario y de las distintas etapas que vive, pero así puedan no tratarse de un cáncer si es necesario prestarles toda la atención para comprender que es lo que pasa y como puede llevarse un control más acertado.

Lo que debe analizarse en una mamografía son varias cosas. Por ejemplo el tamaño, pues si son de más de 2mm se llaman macrocalcificaciones y suelen ser benignas, si son de menos de 1mm son microcalcificaciones y pueden ser sospechosas de malignidad. Su forma, redondeadas, puntiagudas, irregulares, ramificadas porque las benignas suelen ser de forma regular y borde específico.

También se debe ver si hay más de 5 en un área de 1x1cm porque ya puede haber sospecha. Se consideran benignas las calcificaciones que presentan cierta estabilidad, contrario a las malignas que tienen a cambiar con el tiempo.

De cualquier forma es importante la detección temprana de cualquier cosa que notemos, por eso acudir al médico y estar pendientes de nuestro propio cuerpo es la solución a posibles enfermedades a futuro.